Sobre la marca
El fundador de la empresa, Friedel Redecker, se ganaba la vida como fabricante de cepillos porque era ciego en la infancia. De su ingenio, su sentido de la calidad y su perseverancia, ha surgido a lo largo de tres generaciones una empresa que vende sus productos naturales en todo el mundo.
Los Redeckers son una familia y una empresa. Ambos pertenecen estrechamente y dónde termina uno y comienza el otro a veces no está exactamente claro. Además de los dos "mayores" Jutta y Gernot Redecker, los dos "menores" Felix (hijo) y Jana (nuera) están ahora en la empresa. El negocio se gestiona de forma conjunta; y donde hay puntos de discusión, se toman decisiones, se resuelven, se ríen, se conviven...
A lo largo de los años, el negocio creció desde pequeños puestos de mercado hasta los primeros clientes habituales y la empresa que opera a nivel internacional que celebró su 80 aniversario en 2015.
Su compromiso
- Que sus productos no solo son bonitos, sino también prácticos.
- Que tienen una función y no sólo amplían su gama de productos.
- Se aseguran de utilizar siempre materias primas naturales y sostenibles a la hora de elegir sus materiales.
- Con cada nueva idea de producto siempre intentan ser fieles a su filosofía.
- Que cada producto sea visto de manera crítica y extensa por cada uno de los miembros de la familia y también por los empleados antes de que aparezca en su catálogo.
- Que ellos y sus empleados disfruten de los productos, porque esta es la única forma en que todos pueden disfrutar de su trabajo y mirar hacia el futuro de su empresa.
- Creen que la calidad y la sostenibilidad siempre demuestran su valía y que esto es y debe ser cada vez más importante en nuestra “sociedad del descarte”.
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